2008: ¡crisis!
Alberto Ford
<albertoford42@yahoo.com.ar>
Diciembre de 2008
PROLOGO
La crisis desencadenada en EEUU podría haber sido prevista por el
gobierno americano con solo utilizar las sofisticadas herramientas de
pronóstico que dispone, pero no lo hizo; por el contrario, vio con
pasividad cómo las cosas se descontrolaban y actuó recién cuando
no era posible volver atrás. ¿La crisis es financiera o de gestión
gubernamental? ¿De quién fue la culpa entonces?
Tampoco los analistas tuvieron un papel muy decoroso en materia de
pronósticosi.
Frente al default, Giovanni Sartori arremetió implacable: “una
ciencia económica que no sabe prever tiene poco de ciencia”ii.
Sin embargo, para descargo de la disciplina, los aspectos
comprendidos en la misma habrían actuado en todo caso de
disparadores de la actual situación.
Un informe del Consejo Nacional de Inteligencia preparado para el
presidente electo, asegura que la influencia de los Estados Unidos de
América disminuirá en las próximas dos décadas. “Tendencia
Global 2025” indica que la actual crisis es el inicio de una nueva
correlación de fuerzas en el mapa mundial lo que dará como
consecuencia que el “sistema internacional, como fuera conocido
después de la Segunda Guerra Mundial, será casi irreconocible para
el 2025, debido al aumento de los poderes emergentes…”.
Se está poniendo el foco en las cuestiones geopolíticas,
aspectos territoriales y de configuración institucional, producto de
la evolución del proyecto globalizador y el rol consecuente de los
EEUU en un mundo que despunta modificado al compás de los sucesos
presentes. La tan mentada “unipolaridad” que llevó a que no
pocos académicos y comunicadores vieran un imperio donde se estaba
incubando la presente crisis, dará lugar transitoriamente a una
configuración global marcada por la multipolaridad, la acentuación
del cuestionamiento al estado nación, el incremento del
regionalismo, y profundas transformaciones socio productivas al
interior de los territorios.
El sacudón de las últimas semanas tendrá (los está teniendo)
efectos extendidos sobre todo del mundo. Pero la influencia negativa
no debe ser vista solo como una muestra del protagonismo de EEUU en
la escena internacional ni una consecuencia del peso de su economía.
Para calibrar con justeza las fuerzas que se han puesto en
movimiento, hay que comenzar por desmitificar el rol de ese
gran país del norte desde que fuera subido a la escena internacional
como el malo de la película.
1. EEUU EN EL SIGLO XX.
En la película “Che, el argentino” se puede ver la denuncia al
imperialismo yanqui realizada en la ONU en 1964 por Ernesto Guevara a
la sazón ministro de industria de Cuba. La presencia norteamericana
había sido muy fuerte en la industria azucarera cubana y la mafia
había transformado la isla en un paraíso del juego y la
prostitución. La denuncia del Che, fundamentada en hechos
indiscutibles, daba empero lugar a dos actitudes que son reflejadas
en la película, el apoyo y la sorna, ambas basadas siempre en
posturas ideológicas que interpretaban los hechos de la realidad
según los intereses en juego y las consecuentes ópticas utilizadas.
Pasado el tiempo cabe preguntarse ¿la presencia norteamericana era
única o dominante si pensamos en países como la Argentina? ¿En qué
se diferenciaba el rol de sus empresas (o la diplomacia funcional a
esos intereses) de las prácticas equivalente de las empresas de los
países europeos, aún las más impolutas?iii
EEUU ha mostrado a los largo de la historia una manifiesta tendencia
al encierro y la autosuficienciaiv;
fue irrelevante su papel militar (no como proveedor de
pertrechos o en el cine) en las dos guerras mundiales. En la segunda,
tuvo que sufrir el sospechoso ataque de Pearl Harbor (toda su flota
en la rada) para que el pueblo americano tomara conciencia de las
acechanzas; de los 50 millones de muertos que se registraron en dicha
contienda, sufrió 244.000 contra no menos de 20 millones de la ex
URSS. En Corea empató y Vietnam le significó una humillante
derrota. Nuestro continente la vio actuar contra las pequeñas
repúblicas centroamericanasv;
la última hazaña militar en lo que algunos supieron considerar como
el “patio trasero” fue la invasión de la isla de Grenada (344
Km2, 89.000 habitantes). Las actuaciones de los últimos
años en el Golfo fueron esencialmente mediáticas, de una crueldad
innecesaria desde el punto de vista militar, injustificadas salvo
para las consultoras y contratos remanentes de armamentos.
Más significativo aún es la forma en que los EEUU fueron afectados
por la globalización: se puede afirmar que ha sido el país que más
profundas transformaciones ha sufrido en los últimos treinta añosvi.
Arranquemos por los setenta.
Algunos recordarán la “diplomacia del ping pong”, un año antes
de los históricos encuentros gestionados por Kissinger de Mao y Chou
con el presidente Nixon. En esa década comenzó la más formidable
transformación que puede acontecer en un país del porte de los EEUU
(solo comparable a la que en forma especular y sincrónica sufrió la
China comunista). Veamos.
Se produjo una generalizada centrifugación hacia ese país de
pequeñas y medianas empresas, mano de obra de intensivas, por
ejemplo, juguetes, ropa, pequeñas herramientas, etc. (todo lo “made
in china” que podemos ver en las góndolas); un traspaso apoyado en
mecanismos como acuerdos entre empresas, transferencia de tecnologías
medias y bajas, provisión de matricería, herramientas, métodos de
fabricación y maquinaria de alta complejidad, formas de organización
empresarial aprovechando la mano de obra barato del comunismo de
guerra y, por sobre todo, la comercialización de las traders
transnacionales que como después veremos con un ejemplo
generalizable se llevan la parte sustancial del negocio.
Otro ícono del imperialismo: la industria automotriz. Ahora
la problemática vuelve en condiciones de drama; de lo que se habla
ya no es de la modernización (o racionalización) sino directamente
del colapso de los tres gigantes de Detroit. Cabe retrotraernos un
poco. Lo que en los ’70 aparecía como una guerra comercial entre
Japón y EEUU, con el tiempo se pudo ver de otra manera: en realidad
la competencia era “intraempresa” porque las automotrices
japonesas y de los otros países derrotados en la Segunda guerra,
como no podía ser de otra manera, fueron botines de guerra. La
preeminencia inicial del país vencedor en el manejo de las empresas
–por caso el dominio americano o inglés sobre empresas japonesas o
alemanas- con el avance de la transnacionalización se vería
sublimada con las “fusiones”: ¿la DaimlerChrysler, mientras
operó, fue americana o de los alemanes? ‘Las empresas surgidas de
la “alianzas” de GM con la FIAT o con Izuzu, BMW con Rover,
Renault con Volvo, etc., ¿a qué país pertenecen? A 25 años de la
finalización de la guerra y con una crisis petrolera a cuestas, el
objetivo fue simple: la excelente pero cara industria automotriz
norteamericana debía ser reconvertida con los nuevos estándares
estéticos y tecnológicos de la globalización, incluida la
eficiencia energética, y nada mejor para ello que inundar el mercado
americano de eficientes coches japoneses (pero ya de empresas
transnacionalizadas) a menor costo, lo que obligaba a la
reconversión de la industria local que era lo buscado. El resultado
se logró: la industria americana siguió siendo de primer nivel pero
con costos equiparables a los de los otros países, es decir,
globalizadosvii.
Pero la historia continúa y esos logros de ayer hoy ya no bastan...
Donde se vieron afectados los cimientos del complejo militar
industrial (junto a la diplomacia el principal fundamento del
imperialismo) fue con la disolución de la ex-URSS, el parate de la
carrera armamentista y el inicio del desarme en sus distintas
modalidades. Una situación nueva en la historia de la humanidad. A
partir de ese momento no habría proyectos nuevos, los presupuestos
se irían reduciendo progresivamente en forma compatibles con la
necesidad de no crear desequilibrios, al mercado solo saldrían las
armas que estaban en proyectos de largo alcance, y una fuga de
cerebros hacia otras industrias de punta no ligadas a la guerraviii.
Finalmente, en un proceso que comenzó curiosamente en 1975 -¡plena
guerra fría!- con la misión conjunta Soyuz-Apolo (casi una relación
carnal), la exploración presente (estación ISS) y futura del
espacio la harán en forma conjunta los países con potencial
para ello.
Territorios de innovación. No hay mal que por bien no venga.
El vaciamiento y la desactivación por falta de sentido de eslabones
enteros del sistema productivo americano en todos sus niveles, liberó
al mercado y puso en disponibilidad científicos y tecnólogos, mano
de obra calificación y aptitud empresarial que fueron reorientados a
fortalecer sectores productivos de punta que desde el territorio
americano hoy pueden mostrar una posición de preeminencia. Pero ese
proceso industrial de constante renovación, que caracteriza a
los EEUU como el territorio de mayor potencial de innovación, se
hace sobre otras bases de las tradicionales. A nadie se le ocurriría
hoy apedrear las vidrieras de los representantes de Microsoft, Intel
o Google como se solía hacer en los ’60 y ’70 con otras de sus
empresas emblemáticas.
Es en ese EEUU, contradictorio y sometido a una fuerte pulsión de
cambio, por los menos desde las últimas tres décadas, frente al
cual los supuestos epistemológicos para apreciar las
transformaciones se veían fuertemente teñidos de connotaciones
ideológicos, que se desencadena en forma sorpresiva una crisis
frente a la cual pocos se animan a aventurar su decurso ni duración.
Sin duda los desencadenante fueron factores de tipo financiero o
económicos (ambas corporaciones debaten entre sí sobre la
importancia relativa de cada uno), pero las variables intervinientes
son mucho más amplias al punto tal de que se puede decir que lo que
está en juego es una reconfiguración geopolítica de alcance
totalizador. No se trata ya de preguntar cuándo va a salir de la
crisis los EEUU sino cómo van a salir posicionados.ix
En su dimensión global, los sucesivos escenarios de la
crisis se irán abriendo como las pestañas de Internet según una
agenda que no puede obviar temas como pobreza / alimentos, comercio /
proteccionismo, cambio climático / mercado de bonos de carbono,
contaminación / energías renovables, junto a diversos temas más
locales como crisis del estado-nación / gobernabilidad /
regionalizaciones / desarrollo local, equilibrios demográficos
(relocalizaciones poblacionales y migraciones), hasta llegar al tema
de la institucionalización de un gobierno mundial, y toda una serie
de temas que hoy no aparecen prioritarios pero que irán cobrando
creciente protagonismo a medida que los que son urgentes se vayan
poniendo en marcha: manejo sustentable de los océanos, conectividad
terrestre de alta velocidad para el transporte de personas y bienes,
amplia gama de recursos naturales, biodiversidad, armamentos
remanentes, espacio, etc. El más abarcativo de todos los temas de
agenda, porque actúa sobre la biosfera, es el cambio climático.
Los cuatro años que faltan para finalizar el proceso abierto en
Kyoto con la firma del Protocolo en 1997, serán los años de
alistamiento para comenzar a recorrer el camino de la
globalización por abajo y hacer realidad opciones que hoy se
abren aunque un tanto difusas, como detrás de un vidrio empañado.
El cumplimiento del protocolo de Kyoto (y su sucesor) es la
“negociación batuta” que marcará sincrónicamente el ritmo de
las demás. El primero de esos escenarios es el levantado en
Washington por el G-20 el último 15 de noviembrex.
2. SE ABRE EL TELÓN:
EL G-20.
Este conjunto reúne 19 países más la Unión Europea según cinco
variables cuidadosamente ponderadas: industrializados, productores de
alimentos, poseedores de reservas energéticas, potencial liderazgo
geopolítico regional y aceptable equilibrio entre los continentesxi.
Como veremos, nadie espera que ese espacio como se suele llamar
ahora se constituya en la expresión del poder global (cosa poco
probable si se trata de correspondencias inter-nacionales),
pero sin duda pasarán por ahí el conjunta de los temas de agenda
que se irán desplegando sucesivamente en los próximos años.
Responde a consideraciones estratégicas plasmadas en sistemas
conceptuales que condensan la relación insumo/producto,
oferta/demanda, que explica mucho de lo que viene en materia de
escenarios globales y de ninguna manera la presencia de los
denominados “emergentes” responde a una graciosa concesión o un
arranque de democratismo de los países desarrollados. Es la fórmula
uno del mundo que despunta (con escuderías de vanguardia y resto
que acompaña).
Según las variables especificadas, el G-20 está constituido por el
G-8=G-7+ Rusia: EEUU, Inglaterra, Francia, Italia, Alemania, Japón,
Canadá + Rusia; la Unión Europea; Argentina, Brasil y Méjico;
Sudáfrica; Turquía, Arabia Saudita; Indonesia; India, China; Corea
del Sur y Australia. Con cierta flexibilidad, algunos de los
elementos de este conjunto responden a distintas clasificaciones. De
1 (una) variable: Turquía, “procónsulxii”
de la cuenca del Mar Negro; China, gran mercado; Sudáfrica,
“procónsul” del África subsahariana; Arabia Saudita, energía.
De 2 (dos) variables: Argentina, alimentos y energías renovables; De
3 (tres) variables Brasil, alimentos, energías renovables,
“procónsul” de América del Sur.: EEUU: alimentos,
industrializado, “procónsul” de América del Norte y Central;
Rusia: energía, industrializado (?), “procónsul” de Eurasia,
etc. etc.
La reunión de Washington del G 20 produjo una extensa declaración
con el siguiente formato: una parte de diagnóstico con 8
dictámenes, una parte de 5 compromisos, los llamados
cometidos con 8 propuestas y 5 principios
que constituyen la médula de la declaración, cada uno de ellos
atados a medidas concretas en el corto plazo (31 de marzo próximo) y
mediano plazo: en total 75 acciones. Los principios son: 1)
reforzar la transparencia y la responsabilidad de controlar los
mercados, 2) mejorar la regulación, 3) promover la integridad de los
mercados financieros, 4) reforzar la cooperación y coordinación en
todo lo atinente a mercados, 5) reformar la instituciones
financieras.
En tiempo record –la reunión preparatoria de ministros de economía
de los países integrantes del G-20 se realizó una semana antes en
San Pablo- se elaboró esta declaración con un grado de minuciosidad
que no es usual en reuniones presidenciales y que solo pudo haber
sido la consecuencia de un consenso previo si se considera la
profundidad y el alcance de sus propuestas. Los detalles de lo
resuelto quedan para la reunión convocada presurosamente en Londres
para el 30 de abril de 2009 donde participarán expertos en temas de
gran complejidad. Lawrence “Larry” Summers en su reciente visita
al país afirmó “ha llegado la hora de los especialistas” en
referencia al tratamiento de la crisis. En los foros de consenso de
los `70 se valoraba el rol de los expertos en las discusiones
internacionales a diferencia de los políticos más atados a sus
compromisos nacionales o electorales:
“…los especialistas serán
más capaces que los políticos para llegar a un acuerdo, pues, para
estos últimos los asuntos se convertirían, con mayor probabilidad,
en símbolos de victoria o de derrota… la especialización crea
cuerpos de conocimientos y marcos intelectuales comunes entre los
expertos de muchas naciones. Se puede construir coaliciones de
especialistas a través de las fronteras nacionales en áreas
funcionales específicas, mitigando el nacionalismo que de otra
manera podría obstaculizar el acuerdo internacional…”xiii
De esos foros de los ’70xiv
se pueden consultar dos informes elaborados por especialistas que
están relacionados con los temas contenidos en el informe del G 20.
Uno del Club de Roma, El orden monetario internacional de
Duncan N. Ndegwa y Roberto Triffin, circa 1975xv
y Hacia un sistema
monetario internacional renovado de Richard Cooper, Claudio Segré
y Motoo Kají, Tokio, octubre de 1973xvi.
Una lectura pormenorizada de los dos documentos y la declaración del
G 20 muestra que las coincidencias de matrices conceptuales entre
ellos van más allá de lo puramente azaroso. Aunque un estudio
comparativo in extenso supera los límites del presente trabajo,
algunos temas coincidentes se ponen en el cuadro siguiente.
Declaración del G 20
|
Cooper, Segrè, Cají
|
Tinbergen
|
|
PRINCIPIOS
|
|||
manejo transparente de los
mercados financieros
|
x
|
x
|
x
|
regulación nacional
supervisada
|
x
|
x
|
x
|
protección a inversores y
consumidores
|
x
|
x
|
x
|
regulaciones nacionales
coordinadas
|
x
|
x
|
x
|
reforma de las
instituciones financieras
|
x
|
x
|
x
|
ALGUNAS ACCIONES
COINCIDENTES
|
|||
ajuste en la balanza de
pagos y modificaciones en las tasas de cambio
|
x
|
x
|
x
|
nuevas facilidades del FMI
para préstamos a corto plazo
|
x
|
x
|
x
|
nuevo y efectivo mecanismo
de consulta dentro del FMI
|
x
|
x
|
x
|
monitoreo del sistema
monetario internacional
|
x
|
x
|
x
|
coordinación de las
políticas macro económicas
|
x
|
x
|
x
|
asistencia al desarrollo
|
x
|
x
|
x
|
POSIBLES ¿PROBABLES?
¿FACTIBLES?
|
|||
reservas de cambio externas
en una nueva cuenta en el FMI
|
¿?
|
x
|
x
|
vender el oro de las
reservas y fortalecer agencias de desarrollo
|
¿?
|
x
|
x
|
creación de nuevas monedas
y fusión de existentes
|
¿?
|
x
|
x
|
utilización de los DEG
como moneda de cambio y reservas
|
¿?
|
x
|
x
|
Temas comunes en la
declaración del G 20 y los informes de Cooper et al. y Ndegwa y
Triffin
Es interesante poner la atención en aspectos del sistema financiero
y en particular monetario que han sido tratados por los especialistas
en los informes de consenso de los setenta pero que no figuran
en la declaración del G 20. Uno de los más sensibles es el futuro
del dólar. Moneda en crisis, que fue perdiendo sus respaldos a lo
largo del último medio siglo pero no su sitial privilegiado como
moneda preferida para atesorar las reservas de los países, adquiere
por eventual omisión un renovado protagonismo. Frente a la
posibilidad de la creación de una nueva moneda alternativa como
ocurrió en Europa con el Euro, una eventualidad que hasta tiene
fecha fija (01/01/10) ¿cómo sería el sistema de cambio de la vieja
a la nueva moneda y la paridad utilizada? ¿En qué situación se
encontrarían países como China que tienen casi 2 billones de
dólares atesorados? ¿Cuál sería la actitud de los poseedores de
depósitos en dólares en el exterior, ante la posibilidad del
cambio? Como factor de sorpresa para los tenedores ya se puede
encontrar en Internet los diseños listos de papeles y monedas del
AMERO que comenzaría a circular en un año en América del Norte en
lugar de las monedas nacionales de los tres países del NAFTA.
En una nota reciente del ex presidente Ricardo Lagos xvii
reivindica el rol de los derechos especiales de giro (DEG), una
moneda virtual creada en los sesenta, como mecanismos de pago y
atesoramiento. En realidad la propuesta viene de más lejos ya que la
hizo en una reunión de la Cumbre de Monterrey, 22 de Marzo de 2002.
El DEG se basa en la confianza y es el resumen de todas las
modificaciones que se harían en materia de mecanismos de pago,
atesoramiento de reservas, etc. en el plano internacional.
Otro aspecto interesante es el de la regulaciónxviii.
Son caricaturescas las discusiones dadas en los medios legislativos
de EEUU con relación a las últimas medidas lo que llevó al
presidente saliente a decir que en realidad el estado no estaba
interviniendo sino haciendo lo posible frente a la gravedad de la
situación para salvar el sistema… La cruda realidad revela que la
“mano invisible” puede haber existido en los estadios iniciales
de la acumulación capitalista, cuando eran más los espacios vacíos
que los llenos en lo referente a oportunidades de negocios. En una
situación de madurez, como la actual, se producen efectos de
concentración que la naturaleza los resuelve con sus propios
mecanismos pero a costa de la destrucción o la parálisis
(alternativa imposible cuando hay personas de por medio).
El tema de la regulación, se ha revelado con una crudeza inusual en
la declaración del G 20; junto a transparencia y responsabilidad,
parece ser la consigna dominante en el encuentro. La postura cobra
relieve si se tiene en cuenta que los participantes protagónicos son
representantes de democracias que defienden el libre mercado, en
especial al país anfitrión. En la declaración se explicita la
defensa del libre mercado, el imperio de la ley, el respeto a la
propiedad privada, y la reivindicación de la inversión y el
comercio libre. Con el tema de la regulación se pone el foco
principal sobre el sector financiero por razones de cercanía pero
alerta el riesgo de una “sobre regulación” que atente contra el
crecimiento económico y obstruya el flujo de capitales en un sistema
que, destacan, ha hecho posible que “millones de personas hayan
abandonado la pobreza”
En la próxima reunión de Londres, en las deliberaciones de las
comisiones de expertos que comenzaran a funcionar a partir de ese
momentos (y que seguramente tendrán una composición más amplia que
el G 20), o sencillamente en la vida diaria de los países, van a ir
apareciendo decisiones en materia de economía y finanzas capaces de
trastornar el escenario global y postergando para otra
oportunidad el final feliz que algunos se apresuran a augurar y
que como una más hubiera alojado en el arcón de los recuerdos la
crisis desatada en 2008.
3. ALGUNAS PAUTAS PARA
INGRESAR EN EL FUTURO CERCANO.
Cualesquiera que sean las razones por las cuales se haya
desencadenada la crisis en Wall Street, sus efectos:
- Alcanzarán a todos los países
- No en todos los países se dejarán ver de igual manera; afectará más a algunos sectores de la actividad que a otros
- Durarán más de lo que se piensa y predice, por lo menos un lustro
- No solo ni principalmente serán económicos y financieros; serán ecosistémicos y de reconfiguración territorial
La crónica diaria nos muestra la febrilidad con que se está
actuando en todo el mundo para tomar medidas que atenúen los
impactos de la crisis. Lo mismo está pasando en nuestro país luego
de un primer momento en que el gobierno creyó que la crisis no nos
alcanzaría.
Se puede conjeturar que no se dejará pasar la oportunidad de
aprovechar la crisis (parte del pictograma chino que está en la
portada) para producir una serie de transformaciones al interior de
los países derivadas de la madurez que va alcanzando el proceso de
globalización. Esa situación de cambio - aunque diferenciada se
sincroniza como consecuencia de la interdependencia- hace previsible
que la crisis continúe por el tiempo necesario para facilitar la
instalación de la fase de alistamiento de la globalización.
La crisis genera inestabilidad, incertidumbre, solivianta el
cuerpo social; es la condición más favorable para producir
estados alterados de proclividad o predisposición profundas en poco
tiempo. Aunque la solución de muchos de esos problemas llevará
décadas, su instalación es pronta, la tendencia está clara y los
escenarios finales no serán abiertosxix
como a veces se piensa. Hay dos situaciones que por sus
características permiten resumir el proceso que se está abriendo en
estos días. Por su significado y la trascendencia que irán
teniendo en la comunicación pública, llegarán a tener un carácter
metafórico que sin detrimento del trastorno global que se está
produciendo, la marcha de esos procesos nos irán dando la pauta de
cómo va evolucionando la crisis. La primera de las metáforas da
lugar a la siguiente tesis.
31.
OBAMA GLOBAL.
El mundo que viene en lo inmediato y en su parte visible debe ser
entendido en clave africana; no tanto por el volumen de las
transacciones o la cooperación en que pueda estar involucrado el
continente negro –compatibles con la lógica y el porte de los
escenarios- sino por la proyección de significados de la ayuda:
desarrollar –no solo “hacer crecer”- a África (Haití en
nuestro continente) significa ante los ojos del mundo que la
globalización ha comenzado a tomar forma por abajo; un
proceso cuya puesta en marcha puede tardar unos años pero cuyos
resultados signarán las próximas décadas; sin prisa pero sin
pausa; con idas y venidas, pero en forma sostenida e irreversible,
como cuando se suelta una pluma (o un plomo, según) y cae sometida a
la gravedadxx.
La asistencia al África adquirirá un carácter hasta se podría
decir de urgencia y cercanía. Ya los medios han mostrado la relación
del triunfo de Obama con el apoyo de sus parientes de la aldea de
Nyangoma-Kogelo, Kenia, a través de una conferencia de prensa dada
en una mesa apoyada en el piso de tierra del patio de la casa
familiar. Todo un símbolo. En la cooperación –de nuevo tipo por
las características de las intervenciones involucradas- no sólo
intervendrá EEUU; también jugarán un importante rol Cuba,
Venezuela, Brasil, Uruguay y Argentina, por el Atlántico; cuanto
menos India y China por el Índico. Un juego de pinzas que tendrá a
Sudáfrica como bisagra, en todo lo referido a la parte subsahariana.
Y a Maradona como unos de las principales articulaciones simbólicasxxi
junto a otras figuras del espectáculo.
32.
OBAMA LOCAL.
La transformación de las automotrices de Detroit es el fin del
capitalismo emblemático. Ayuda condicionada a las tres grandes
automotrices. Luego de la reconversión de los ’70 comentada más
arriba, es un golpe de karate a la concepción más clásica de lo
que es el capitalismo americano. “No es una opción” dejarlas
caer, pero deberán reconvertirse para fabricar coches más chicos y
menos gastadores, dijo el presidente electo. La consigna implica una
pulsión transformante difícil de calibrar aunque sí intuir: se
producirán impactos en el empleo, la calificación de recursos
humanos, la especialización en modelos de autos, centrifugación
productiva; en resumen, una serie de consecuencias inéditas dadas en
el país capitalista más avanzado. Empero, como se ha dicho más
arriba, a partir de su potencial de innovación, los territorios
americanos afectados, a la larga se verán favorecidos con nuevos
paradigmas productivos que los mantenga en la cresta de la ola
modernizadora.
4. EN EL MEDIANO Y
LARGO PLAZO.
Cuando se habla de “alistamiento” se está pensando en un
lustro en que si bien la agenda se irá desplegando en forma
sucesiva los distintos escenarios de negociación quedaran abiertos
por décadas, y terminarán evolucionando en forma simultánea como
en una sesión de teatro con tarimas circulares donde se pueda
participar al mismo tiempo de distintas funciones. Esta afirmación
no se apoya en valores; no tiene nada de optimista ni de pesimista.
Es una lógica de cambio irremediable, con todas las oportunidades y
riesgos que entraña un rumbo mutacional.
Los procesos más tangibles en el mediano plazo serán en definitiva
el avance inexorable de las reconfiguraciones territoriales. No es
posible imaginar para siempre un mundo de naciones: según los
preceptos globales los estado-naciones ya cumplieron su ciclo con 200
años de vida. Europa ya está cuasi regionalizada (véase:
www.crpm.org).
En EEUU es una novedad la forma de ver el territorio desde la Reserva
Federal (véase www.federalreserve.gov/otherfrb.htm).
No hay país que pueda soslayar de ese destino fatal. De lo que se
desprende que hablar sobre las naciones en el futuro sin tener en
cuenta esa pulsión reconfigurante habrá sido como si un obrero
gráfico imaginara la evolución de la linotipia por los ’70 sin
tener en cuenta los procesadores de textoxxii.
Transitoriamente se irán conformando una diversidad de agrupamientos
teniendo en cuenta distinto tipo de afinidades en la búsqueda de
mejores posiciones globales. Así, convivirán diversas
configuraciones y los países podrán ser parte de más de una de
ellas. Por caso, nuestro país puede pertenecer al Mercosur, Unasur,
el ALCA y otras formas de agrupamiento. Todo es transitorio y
dinámico. Los procesos más sustentables serán aquellos que tengan
dimensión local y microrregional que es como finalmente se va
a organizar el territorio en cada caso para alcanzar masa crítica;
todo regido por una función estatal a nivel mundial (no
estructura) con las modernas formas de gestión que posibilitan las
tecnologías de la información y las comunicaciones, otro tema que
amerita un tratamiento especial.
Sin embargo, es oportuno hacer algunas reflexiones sobre los
paradigmas socio económicos y productivos que pueden ir cobrando
mayor fuerza en lo sucesivo, cuando el mundo comience a despegar de
la crisis destructora / transformadora, luego del lapso temporal que
hemos llamado de alistamiento.
Hemos vivido treinta años de transformaciones macroeconómicas donde
las teorías (paradigmas) dominantes no consideran de ningún modo
los aspectos micro de la vida social, aquellos que afectan en forma
directa a las personas, las familias y las barriadas. Son
innumerables los ejemplos de gestión gubernamental (como en los
noventa en la Argentina) en el marco de acciones a nivel mundial
(apoyada en sospechosos consensos como el de Washington), que han
producido transformaciones básicamente de destrucción (“creadora”
según el eufemismo de Porter) de las formas tradicionales de
gestión, estructuración de la sociedad y del estado:
privatizaciones, aperturas de las economías (o mayores protecciones
aunque también transitorias según el porte del país),
desregulaciones, descentralizaciones, etc. La parafernalia de medidas
ha dado lugar a un debilitamiento ostensible de la estructura estatal
tradicional al nivel de la nación, consecuente con una
cuestionamiento de tipo epocal que aduce –por cierto con bastante
justicia- que el estado-nación ha quedado fuera de escala por ser
demasiado grandes para los problemas de la gente (hoy revelados hasta
la obscenidad por los medios) y demasiado pequeño para terciar con
alguna expectativa en la negociación internacional.
De aquí en más el foco de la gestión se traslada más a la base,
en los lugares donde las variables decisivas no pueden resolverse
a nivel macro. ¿Cuáles son esas variables? Algunas son las
siguientes:
- mercado
- competencia
- equidad
- protección
- inclusión
- regulación
- función estatal
- consumo
- etc.
La combinación de esas variables puede dar lugar a distintas
fórmulas pero hay una cosa clara: comenzar a resolver esas
ecuaciones requiere de un tipo distinto de gestión aún desconocida
con nuevos actores que no van a ser los tradicionales.
La noción de mercado es clave. Es la forma de organización
social y productiva que permite poner en movimientos las mejores
cualidades de las personas y hacerlas crecer personal y socialmente.
Implica asumir riesgos, plantearse desafíos, que la persona se
sienta plena con los logros y aporte al bienestar común esos
sentimientos de autoestima y satisfacción. Es la organización que
permita poner en evidencia lo ineficiente y evitar el macaneo y la
hipocresía.
Naturalmente tiene que existir la equidad entre los más
dotados y los que quedan fuera de la competencia. La distribución de
la riqueza (que no son bolsones de comida ni planes sociales a los
que sin embargo se debe apelar transitoriamente toda vez que sea
necesario) debe entenderse como poner al alcance de todo ciudadano
las mejores opciones para su crecimiento personal y familiar.
Hay una acción de regulación estatal que es
insoslayable (ya hemos recordado que todo sistema se autorregula pero
por medio de la destrucción o la parálisis, lo que es inaceptable
cuando hay personas involucradas). Sin embargo, el estado debe
desestructurarse progresivamente para que pueda cumplir sus funciones
en muchas mejores condiciones con la ayuda de las nuevas tecnologías
de la gestión y las comunicaciones. El tema de la reinclusión
social por medio del trabajo productivo, y la protección para
los más débiles, es motivo de políticas estatales que el mercado
por sí mismo no puede resolver. El tema del consumo racional
tiene que ver con el bienestar de las familias y el funcionamiento
del sistema productivo.
En síntesis: se marcha a un sistema mundial en el largo plazo con la
organización del capitalismo y los valores del progresismo. Tal vez
algo referenciado a las socialdemocracias del norte de Europa,
actualizado y con un poco menos de aburrimiento
Esos son los valores que se pueden detectar en lecturas atentas de
trabajos formulados sobre todo en las décadas de los sesenta y
setenta y que, como hemos visto, hoy están siendo tenidos en cuenta
a partir de que han formado opinión en la élites del poder. El
problema pasa por otro lado: esos valores no pueden ser realizados
desde arriba cuya acción contradictoria, como hemos visto en los
últimos años, tiende en gran parte a destruirlos. Es una situación
paradojal.
Se sabe que las paradojas no se resuelven en el plano en que se
manifiestan ni desde los polos que las generan; para darles “salida”
(ya que no tienen solución en los marcos de la lógica formal) hacen
falta desplegar nuevos espacios y polos de poder. Es la nueva
posibilidad que se abre de formular una nueva teoría política del
progresismo que se haga cargo de la globalización por abajo y
permita darle una solución a los problemas de la gente aprovechando
las posibilidades que ofrece el mundo de hoy y sorteando sus
acechanzas.
Es volver al posibilismo (la política es el arte de lo posible; la
nueva política no tiene porqué reinventar la pólvora) en los
marcos del sistema y sepultar dignamente el voluntarismo que murió
con los fracasos del socialismo real de las últimas décadas.
Estamos en un mundo altamente determinado pero el que sabe puede
bailar el tango en una baldosa y hacerlo bien; es cuestión de
reaprender.
Respeto a la diversidad; fomento a la creatividad. Mucho apoyo a la
educación de nuevo tipo y altísima calidad. Hoy: ¿qué porcentaje
del patrimonio creativo común se activa para la toma de decisiones a
todos los niveles? ¿Cuánto de esa creatividad revelada o en
potencia se pone en valor?
Hay que liberar la energía, la voluntad, la decisión, el deseo de
vencer, la ambición, la autoestima, la alteridad; todos esos valores
se tienen que expresar en los actos mínimos de lo cotidiano. Las
fantasías del acto heroico y transcendental, que se puede plasmar
solo en circunstancias casuales y remotas, no hacen al día a día
que es cuando se deciden los destinos de los pueblos.
5 ¿Y EN NUESTRO PAÍS?
La mencionada frase de Helio Jaguaribe -tan manoseada que ha
impedido reflexionar sobre sus significados- habla del “éxito
fatal” de la Argentina. La cosa es más compleja… y riesgosa.
Efectivamente, Argentina está ingresando en estos tiempos en su
segundo ciclo largo de crecimiento luego del primero, agro
exportador, atribuido en sus grandes líneas al papel rector de la
generación del ’80. Ese modelo, que duró algo más de setenta
años, desde 1860 hasta la década del treinta del siglo pasado, tuvo
su fase de alistamiento ya desde los años ’20 del siglo XIX
coincidente con los desórdenes institucionales que precedieron la
llegada de Rosas a la gobernación de Buenos Aires. Luego, en el
momento de mayor enfrentamiento de Buenos Aires con las potencias
coloniales dominantes se producían dos fenómenos complementarios:
1) a través de una inmigración incipiente pero calificada, una
incesante penetración de oficios, tecnologías sencillas, genética
animal y acciones de conocimiento del territorio, que fueron la base
para la modernización que se daría luego, 2) un progresivo desgaste
de los sectores sociales que conformaban restos de la dominación
española. A partir de Pavón y la presidencia de Mitre, se
sucedieron setenta años de crecimiento –también con idas y
venidas- pero que ubicaron a la Argentina entre las naciones de mayor
consideración en el mundo. Pero ese éxito sin sólidas bases estaba
parado sobre el barro. Cuando cambiaron las condiciones externas que
le daban sustento y sentido la Argentina entró en una espiral de
crisis de la que aún estamos sufriendo sus consecuencias. La
culminación de un modelo considerado exitoso fue el inicio de una
decadencia irreversible. Paro no pocos formadores de opinión –y
la propia historia oficial- consideran este ciclo de crecimiento como
un logro sin contradicciones. Pero no es lo mismo crecimiento que
desarrollo. Y esa es la enseñanza que no nos debe llevar a
tropezar con la misma piedra.
Argentina a partir de ahora va a crecer de la manera que lo hizo en
el siglo XIX. Sencillamente porque la nueva división internacional
del trabajo requiere de insumos que nuestro país puede proveer con
ventajas derivadas de su potencial productivo, especialización,
recursos y escasa población. Sin embargo, el desafío es el
desarrollo. Y la Argentina tiene que comenzar a resolver un problema
que le llevará décadas culminar: el del conurbano bonaerense,
su crítico problema estructural como lo es las automotrices para
Obama. El cambio de tendencia presupone políticas activas y
claramente explicitadas de desarrollo regional para dar salida a los
desequilibrios de las cargas demográficas que hoy oprimen a nuestro
país y dan sustento a su perverso sistema político. Ello implica
procesos de regionalización a todo nivel, en especial subregionales
transfronterizas, para ir suplantando progresivamente los
caprichosos diseños decimonónicos de nuestros estadonaciones, por
configuraciones ecosistémicas que respeten el conjunto de
identidades que fueron tronchadas oportunamente.
Si con autonomía se ponen en marcha esos procesos el resto caerá
por gravedad, atraído por las pulsiones globalizadoras que están
afectando creciente e inexorablemente a nuestro país.
iCITAS
Y NOTAS
hubieran
tenido en cuenta lo que ocurrió en la Argentina hace 10 años. ¿En
qué se diferencia la reciente manipulación de subprimes
en Wall Street con la práctica de los bancos de nuestro país antes
de 2001 al ofrecer tentadores créditos a los poseedores de
cuentas-sueldo sin otra garantía que su titularidad? Los paquetes
subprime criollos que quedaron de esa acción irresponsable de la
banca fueron recalando sucesivamente en estudios contables de
jerarquía decreciente parece ser que con relativo éxito como lo
muestran las huestes de incobrables que hoy esperan una amnistía
para rebancarizarse.
ii
Giovanni
Sartori. Una
debacle muy fácil de prever.
Corriere
della Sera.
Publicado en edición impresa de La
Nación,
17 de octubre de 2008.
iii
El
interrogante busca tener una idea más ajustada del porte de la
relativa influencia norteamericana en nuestro continente (y el
mundo) para ver las condiciones de extrema vulnerabilidad
institucional y económica que ha debido tener un país de esa talla
para que en unas pocas semanas el sueño americano se transforme en
una pesadilla.
iv
junto
a la Argentina son los dos países que en el mundo más muestran esa
actitud porque son autosuficientes lo que da lugar a veces a un
sentimiento concomitante.
v
un
encono profundo contra el imperialismo anida en la memoria de los
pueblos centroamericanos como lo reflejaba el Che en su intervención
en las NNUU
vi
cuando
se dice “afectado” no quiere decir que los cambios hayan sido
buenos o malos (eso depende de las categorías axiológicas en
juego); se hace referencia a las profundas transformaciones que ha
sufrido EEUU en el fundamento de su estructuración socio económica
y que son verdaderos anticipos de la nueva situación creada en ese
país.
vii
…la
historia continúa y ahora aparece la posibilidad de la quiebra de
esas grandes empresas como las automotrices según una ley de la
globalización aún no formulada: los
territorios de innovación están centrifugando permanentemente
(como
los círculos concéntricos de un estanque cuando se tira una piedra
o las ondas de radio cuando se expanden al éter)
los procesos productivos
que
van quedando levemente retrasados con referencia a su valor
agregado en comparación a otros desarrollos (nuevos productos) que
se van generando en cada momento en ese u otros lugares que están
en la punta de la cadena de la innovación;
si eso no fuera así, es decir si la centrifugación no se
produjera, de inmediato comenzarían a crecer a mayor velocidad que
lo habitual los procesos entrópicos en esos territorios, quitando
de esa manera opciones de innovación (y en consecuencia
competitividad) por ocupación ociosa, mal uso o esterilización de
potenciales de creatividad. Comenzaría para ese territorio una
pérdida de vigor y de espacio que sería progresivamente ocupado
por otras opciones productivas en ese u otro territorio con más
dinamismo de innovación. En lugar de carromatos EEUU tiene que
comenzar a fabricar gráciles coches a pila.
viii
no
es correcto pensar que las guerras del golfo se hicieron por presión
del decadente complejo militar industrial pero sí que fueron la
oportunidad para probar algunas armas nuevas recién salidas como
productos de proyectos anteriores de larga duración, que
trascendían los recortes sufridos como consecuencia de la abrupta
finalización de la carrera armamentista.
ix
parafraseando
al politólogo brasileño Helio Jaguaribe quien refiriéndose a la
Argentina lo afirmó en Madrid en 1991 y luego el ex presidente
Duhalde repitió más de una vez, se puede decir que, a pesar de
todos los trastornos presentes, la globalización está condenada al
éxito (hay que ver lo que se entiende con el aserto.
x
Finalizando
este trabajo, en Bruselas se produce la histórica reunión de la
Unión Europeo donde se acuerda el “5x20”: para el 2020, reducir
20% las emisiones de gases de efecto invernadero con respecto a los
niveles de 1990, usar 20% de energías renovables y disminuir el
consumo energético en un 20%. La reunión se hace paralela a la 14
Conferencia de las Partes de la Convención de Cambio Climático en
Polonia. A partir de 2013, cuando finaliza el Protocolo de Kyoto,
las empresas europeas deberán ingresar plenamente en el mercado de
bonos de carbono lo que tiene fuertes implicancias en países
emergentes y en desarrollo. La influencia europea arrastrará al
resto del mundo, en primer lugar a Obama, que decidirá con
características propia algo equivalente. ES LA SEGUNDA PESTAÑA QUE
SE ACTIVA EN LA AGENDA DE LA CRISIS.
xi
la
reunión del 15 de noviembre puso en evidencia el descontento de
España por su exclusión y la extrañeza y hasta el fastidio de
algún columnista local por la presencia de nuestro país
–inmerecida según este punto de vista- en detrimento de la
española. Hay que decir que el G-20 se formó en tiempos de De la
Rúa, un indicador de que la inclusión de nuestro país debe haber
respondido a consideraciones estratégicas. Por la única razón que
España debería haber integrado el G-20 era por su rol rector en
Iberoamérica, pero ese lugar lo ha ocupado Brasil y es sabido que
en un sillón no caben dos países (en lo demás su papel no se
diferencia de Holanda u otros países de Europa, un continente ya
suficientemente representado); por eso España quedó afuera de la
reunión de Washington más allá de que Rodríguez Zapatero a
título personal haya entrado por la ventana merced a los buenos
oficios de Sarkozy (de doble representación: presidente de Francia
y la Unión Europea) que le cedió uno de sus bonetes.
xii
se
refiere a la forma en que organizaba sus provincias el imperio
romano; en este caso, según algunos analistas, alude al rol de
gerenciamiento regional en esta fase de alistamiento de la
globalización que van a jugar algunos países como ha comenzado a
hacerlo en forma ostensible Brasil en América del Sur.
xiii
Richard
Cooper, Karl Kaiser, Masataka Kosaka. Hacia
un sistema internacional renovado.
Cuadernos
del CIDE.
Números 2-3, pág. 122/3, México, 1977/8. Única versión
conocida en castellano. También ver <www.trilateral.org> o
<http://www.scribd.com/doc/202821/1977-TC-R14-TOWARDS-A-RENOVATED-INTERNATIONAL-SYSTEM-OCR-by-MatRoX>
xiv
sobre
los foros de los setenta se ha tendido un manto de silencio. En un
caso se los acusa de actitudes conspirativas como si todo lo que
pasa estuviera manejado desde las sombras desde esos espacios; en
otros, como el del Club de Roma, se aduce que sencillamente se
equivocó en sus pronósticos: se alude al informe preparado por
Dennis Meadows llamado “informe del MIT” más conocido como los
“límites del crecimiento” o sencillamente “informe del Club
de Roma”, en el que se decía que el uso irresponsable de los
recursos naturales podía llevar a unas situación de colapso en la
tierra. La acusación deriva del hecho de que no se llegó al fin
anunciado cuando lo que el informe perseguía era justamente crear
una conciencia del uso racional de los recursos, por medio de la
disuasión y la persuasión, lo que se fue logrando a partir de una
actitud ecológica que hoy está plenamente instalada. Si bien la
contaminación no ha terminado en el planeta (y falta mucho para que
ello suceda) se puede decir que el informe cumplió con su cometido
porque la tendencia despilfarradora se ha revertido y los controles
y penalidades irán creciendo como se demuestra por ejemplo en el
tema del cambio climático y el naciente mercado de bonos de
carbono. Con respecto a la Comisión Trilateral, fue un foro del
más alto nivel de empresarios, intelectuales y ex (o futuros)
gobernantes que, en un momento clave, la década del 70, abordaron
en la búsqueda de consenso los temas esenciales de la agenda
internacional. La calidad de los informes (en algunos casos su
preparación demandó hasta 3 años, supervisados personalmente por
Brzezinski y luego Kissinger), los transforman es una fuente
insoslayable para conocer el punto de vista de las esferas más
altas del poder mundial. Los 14 informes fundacionales de los ’70
pueden consultarse libremente en <www.trilateral.org>
xvver
Reestructuración
del Orden Internacional,
coordinador Jan Tinbergen, Fondo
de Cultura Económica,
México, 1977. Serie de informes solicitados por el Club de Roma.
Algunos
párrafos y recomendaciones del libro “…entre 1970 y 1972 las
reservas mundiales en dólares aumentaron más que en todo el
período anterior…las consecuencias inflacionarias de tal
explosión de las reservas mundiales y de los pasivos
norteamericanos convertibles en oro -cinco veces mayores que el
total de oro y otros activos de reserva de los EEUU- condujeron al
derrumbe de Bretton Woods…
…los
depósitos en dólares en los países contribuyeron a facilitar
préstamos e inversiones de parte de los países ricos…
…los
consumidores finales de los países industrializados pagaban más de
200.000 millones de dólares por los bienes del Tercer Mundo… pero
los países pobres solo recibían 30.000 millones…
…en
1961 “los países ricos de economía de mercado convinieron en
principio en destinar a los países pobres 1% de su PNB” (solo
Suecia cumplió)… en 1975, el flujo de ayuda oficial para el
desarrollo proveniente de los países ricos… ascendió al 0,3% de
su PNB…”
Algunas
de las reformas de debían ser adoptadas según los informes:
La
creación de reservas se debe adaptar al crecimiento de la economía
real (comercio y producción)… esas reservas deben ser “depósitos
de reservas internacionales en el FMI… semejantes a los DEG cuyas
cantidades serán concertadas…”
El
manejo de los recursos se debe acordar democráticamente lo que
implica: 1) eliminación del oro como reserva y de las reservas
propiamente dichas. El informe sostiene que: “la temprana adopción
y ejecución de estas reformas habría evitado la desordenada
inflación mundial que contribuyó a la explosión de los precios
del petróleo (p. 196).
Algunas
propuestas:
A.
Mediano plazo.
.eliminación
de las monedas nacionales y el oro para las reservas
.creación
de monedas en base a DEG para reservas
.directrices
conjuntas para la intervención en los mercados de cambios
.monitoreo
conjunto
B.
Largo plazo
.acuerdo
mundial sobre las reservas
.desarrollo
del tercer mundo
.acuerdo
mundial sobre mecanismos de ajuste del tipo de cambio
.fusiones
de monedas…”
xvi
ver
revista del CIDE citada, pág. 321. También en
<http://www.trilateral.org/projwork/tfrsums/tfr01.htm>
Resumen
Informe “Hacia un sistema monetario internacional renovado” de
Cooper, Segré y Kají, Tokio, octubre de 1973.
“…la
anarquía monetaria no debe llevar a socavar la confianza en
construir la prosperidad a lo largo de dos décadas ni producir un
nuevo período de restricciones y mutuas hostilidades entre
posiciones nacionales atrincheradas.
De
acuerdo a ello, los consultores creen que los gobiernos deberían
proceder sin vacilar a renovar el sistema internacional monetario.
Las
reformas de largo plazo deberían incluir:
- Un mejoramiento en el proceso de ajuste en la balanza de pagos con el auxilio de modificaciones pequeñas y orientadoras en las tasas de cambio
- Confirmación del rol central de las reservas primarias como un fondo fiduciario internacional denominado bancor, para satisfacer las necesidades de liquidez y suplantar gradualmente otras formas de atesorar las reservas
- Creación de una nueva facilidad a ser alojada en el FMI para préstamos de emergencia de corto plazo tendientes a evitar la especulación y otras alteraciones en el movimiento de capitales
- Consolidación de las reservas de cambio externas, inicialmente como una base opcional, dentro de una nueva cuenta en el FMI
- Establecimiento de un nuevo y efectivo mecanismo de consulta, dentro del FMI, para monitorear el sistema monetario internacional renovado y fomentar la coordinación y la consistencia de las políticas económicas domésticas
Los
autores del informe también creen que deberían tomarse un número
de pasos intermedios para ayudar a restaurar el orden y la
estabilidad del sistema monetario internacional. Para ello se
debería:
- Comprometerse a coordinar la intervención en el mercado de cambio de ser necesario para prevenir movimientos erráticos en las tasas de cambio
- Aumentar y multilateralizar las facilidades de préstamos de corto plazo para neutralizar el movimiento especulativo de fondos
- Compatibilizar, sobre una base que luego pueda ser tomada por el FMI, la tenencia oficial excesiva de dólares y otras monedas de cambio
- Indicar la no disposición tanto a soportar el mercado de eurodólar y someter a un cerrada vigilancia
- Vender oro, sobre una base cooperativa y coordinada, en el mercado privado con el objetivo de ser transferido a las instituciones financieras internacionales para asistencia al desarrollo…”
xviii
Todos
los procesos
(naturales y artificiales) son autorregulables.
En sus inicios esos procesos muestran aumentos de cantidad en sus
componentes principales (acumulación); a medida de su transcurso,
ese crecimiento deviene concentración (unos crecen a costa de
otros); finalmente, superado un punto se satura y se produce la
destrucción del sistema (colapso). Luego en algunos casos
recomienzan con los restos dando lugar a una nueva configuración
que se desarrolla en otro nivel. Se puede ver como una película ese
mecanismo (nace, crece, se desarrolla y muera) en distintas
situaciones. Mencionemos algunos casos.
- glaciar Perito Moreno
- castillo de naipes
- lancha “patera”
- refugios urbanos en las concentraciones populares
- descontento social
- caldera
2.
Los procesos de mercado también son autorregulables; empero, al
involucrar personas, no se debe llegar a la etapa de destrucción
(“creadora” según el eufemismo de Porter). La “mano
invisible” es una metáfora que se le atribuye a Adam Smith (en
realidad solo mencionó la noción en tres oportunidades a lo largo
de 900 páginas) para indicar la forma en que el mercado libre
asigna los bienes en la economía. Según wiki “Smith intentaba
demostrar la existencia de un orden económico natural, que
funcionaría con más eficacia cuanto menos interviniese el
Estado…regulando
las conformaciones sociales y compensan los excesos por sí sola”.
Solo
puede funcionar en la economía el mecanismo de la autorregulación
sin llegar a la fase destructiva en una formación que está en sus
comienzos; es decir, con relación a las personas, un sistema de
pocas transacciones, pocos productos de bajo valor agregado, lenta
circulación del dinero (o sea en la época de AS). Si, por el
contrario, el sistema se va complejizando, y aumentan las variables
mencionadas, la ley de Ashby de la “variedad requerida” nos mide
la faz cuantitativa de la complejidad con relación a la cantidad de
factores existentes y las relaciones que se entablan entre ellos. En
ese caso no es tan fácil que una fluctuación producida por una
unidad de acción (demanda u oferta) se acomode tan naturalmente
como pretendía AS; se entra a la fase de concentración en la que
relativamente los pobres tienen cada vez menos y los más ricos más.
Esa distribución inequitativa no se detiene espontáneamente;
requiere una intervención ad-hoc.
El
“poder de mercado” muestra la capacidad de una persona (o de un
pequeño grupo de personas) para influir indebidamente en los
precios de mercado. Un caso extremo: supongamos –nos dice wiki-
que “todos los habitantes de un pueblo necesitan agua, pero sólo
hay un pozo. Su propietario tiene poder de mercado -en este caso, un
monopolio- sobre la venta de agua. No está sujeto a la rigurosa
competencia con que la mano invisible frena normalmente el interés
personal. El lector verá que en este caso la regulación del precio
que cobra el monopolista puede mejorar la eficiencia económica”
Aunque
la noción de “mano invisible” para algunos es una muestra de
las limitaciones de AS para comprender los mecanismos de regulación
del mercado, la oposición al rol regulador del estado ha llegado
hasta nuestros días como una categoría ideológica que se ha
manifestado con relación a las medidas adoptadas para palear la
crisis. No más escuchar los discursos del presidente Bush para
comprobar la resistencia (por lo menos conceptual) con que han sido
adoptadas las medidas correctoras. No ha sido el caso de la
declaración del G 20 donde la noción de regulación constituye uno
de sus aspectos medulares
xix
la
prospectiva
y la simulación
de escenarios es
una tecnología madura
que ya estaba a punto a fines de los sesenta cuando Jay Forrester en
el MIT publica la Dinámica Global y la computación alcanzado
suficiente capacidad para simular modelos. No es motivo de debate en
este trabajo, pero el punto de vista que lo sustenta es que
desaparece la contingencia hasta donde la historia es motivo de
modelación. Kissinger lo dijo sin ambages: “el
futuro no se enfrenta, se construye”
xxuna
lectura de los materiales citados de los ’70 muestra que este
procedimiento de largo plazo no tiene nada que ver con la
generosidad sino como el más puro autointerés de tipo capitalista.
Ya Mitterrand lo dijo en 1989: “necesitamos 2000 millones de
nuevos consumidores”. Hoy se puede producir cualquier bien o
servicios en cantidades ilimitadas; se ha salido del reino de la
escasez; “solo” falta organizar la logística para que la
producción pueda llegar a los consumidores potenciales para que el
sistema funcione a pleno. Por cierto este difícil proceso llevará
décadas + sangre, sudor y lágrimas.
xxi
Fue
apoteótica la visita de Maradona a la India sobre todo el encuentro
con la congregación de la Madre Teresa. Hay que seguir atentamente
la evolución del proceso hacia el mundial de 2010 en sus aspectos
sociológicos y comunicacionales
xxii
Esto
vale especialmente para China en la que no pocos comunicadores ven
la potencia dominante del futuro. Es un ejemplo el de las muñecas
Barbie. Estas muñecas diseñadas por la empresa matriz
norteamericana de Mattel, se venden a 10 dólares en el mercado
estadounidense. La producción se lleva a cabo en países con mano
de obra barata como China. De toda la cadena de valor, solamente 35
centavos y 65 centavos de dólar corresponden a la mano de obra y a
la tela china, respectivamente. O sea el 10% que para China puede
ser suficiente pero que, al mismo tiempo, es indicativo de los
acuerdos Nixon Mao de 1974. ¿Hay alguna razón para pensar que ese
rango de participación china en la cadena de valor va a cambiar en
algún momento siendo que los acuerdos de ese entonces se
establecieron sobre esas bases? ‘Si el poder no nace del fusil
como sostenía Mao, por qué vamos a pensar que nacerá del PBI..?
De cualquier manera, cuando el PBI chino alcance la cima, el proceso
de regionalización habrá confinado a ese gran país al podio de
los símbolos como lo es ahora su muralla. Por lo pronto la suma de
las economías nacionales irán siendo una parte cada vez menor de
la economía transnacional, la que se desenvuelve en el cíber como
internet, y que no está sometida a ningún control nacional ni
figura en ningún asiento (la que atesora la parte mayor del valor
de la Barbie menos
lo que queda en el territorio chino y americano).
Boston
New York
Philadelphia
Cleveland
Richmond
Atlanta
Chicago
St. Louis
Minneapolis
Kansas City
Dallas
San Francisco
Board
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